Un millonario deja vivir en su garaje a una familia sin techo. ¡Su corazón se hunde al día siguiente!

Al quedarse solo en su casa, Peter se vio acosado por un sinfín de preguntas. «¿Debería haber sido más precavido? ¿Podría haberlo evitado?», se preguntaba una y otra vez. Cada decisión que había tomado se repetía en su cabeza, desde invitarles a entrar hasta descubrir el robo.

Peter se sentó en el salón poco iluminado, mirando la nota. No podía evitar la sensación de que se le había pasado algo por alto, un detalle clave que podría desvelar la verdad. «Averiguaré lo que ocurrió de verdad», se prometió en silencio, y su determinación se endureció.