Fácil: así se limpian los vómitos de mascotas de la alfombra

clean pet vomit

¡Con estos consejos, limpiar el vómito de la alfombra será pan comido!

Cada vez que tu gato o perro vomita, ya es desagradable limpiarlo. Pero se vuelve más doloroso cuando el vómito se encuentra en la alfombra. Hace que la alfombra se manche, huela y sea muy difícil sacar todo el vómito. ¡Pero con estos sencillos pasos, limpiar el vómito de tu mascota será pan comido!

Actuar rápido

Siempre que tu mascota deje un pequeño «regalo» en la alfombra para que tú lo limpies, debes actuar rápido. Según Angela Brown del canal de YouTube «Ask a House Cleaner», actuar rápido puede marcar una gran diferencia. Ella dice: «Dejar vómito invita a las bacterias a medida que las manchas y el olor se asientan en la alfombra, por lo que es importante eliminar el vómito lo antes posible». Entonces, tan pronto como encuentres el vómito, debes ejecutar los pasos que se enumeran a continuación.

Paso 1

Usa una toalla de papel para quitar primero el vómito. Asegúrate de obtener todo lo que puedas con la toalla de papel. Luego, desecha la toalla de papel.

Paso 2

Usa otra toalla de papel (seca) para eliminar la humedad. Simplemente seca el área y deja que la toalla de papel absorba la mayor cantidad de líquido posible.

Paso 3

Usa un quitamanchas y quita olores para tratar la mancha. Usa uno que tenga enzimas. La mayoría de los removedores que contienen enzimas son seguros para tu mascota y tratan tanto el olor como la mancha al mismo tiempo. Brown aconseja: «Evita los productos químicos con fuertes advertencias respiratorias o de toxicidad, que pueden dañar a las personas y las mascotas». Y asegúrate de que el producto que uses también sea seguro para tu alfombra. ¡No querrás limpiar una mancha y quedarte con una decoloración en tu alfombra!

Una vez que hayas elegido el removedor adecuado, todo lo que necesitas hacer es rociar el área y dejar que se absorba por un rato. De cinco a diez minutos serían suficientes para que el removedor haga su trabajo.

Etapa 4

Toma otra toalla de papel y seca el área. De esa manera, la toalla de papel puede absorber cualquier líquido que aún quede.

Paso 5

El último paso es esperar hasta que la alfombra esté completamente seca. Después de eso, puedes aspirar la alfombra. ¡Parecerá como si no hubiese pasado nada!

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Fuente: Well + Good | Imagen: Unsplash, Mike Burke