Un sacerdote pide a la novia que se aparte mientras el novio se declara a su hermana: su reacción sorprende a todos

Desde el interior llegaba el sonido de voces alzadas: los tonos agudos y furiosos de Stephanie atravesando la puerta, la voz más grave de Liam rasgada por la tensión. A Clara se le oprimió el pecho cuando se acercó más, tratando de captar las palabras. El pulso le rugía en los oídos.

No podía soportarlo más. Cerró el puño y aporreó la puerta. «¡Abre!», gritó, con la voz entrecortada. «¡Sé que estás ahí!» La discusión se interrumpió en un instante. Por un momento sólo hubo silencio, luego susurros apresurados, el sonido del movimiento. Finalmente, el cerrojo se deslizó hacia atrás y la puerta se abrió de golpe.