Un sacerdote pide a la novia que se aparte mientras el novio se declara a su hermana: su reacción sorprende a todos

Quiso gritar, exigir una explicación, pero su cuerpo la traicionó, moviéndose casi por sí solo. Sus rodillas flaquearon, su pecho se contrajo, y bajó del altar, el mundo inclinándose bajo ella como si estuviera cayendo lejos de todo lo que había soñado.

Stephanie entró sin vacilar, deslizándose en el espacio que Clara había dejado como si siempre le hubiera pertenecido. Se agarró al brazo de Liam, con una sonrisa deslumbrante y los ojos brillantes de triunfo. La multitud se quedó boquiabierta. Los invitados miraban a Clara y a Stephanie, sin saber si se trataba de una broma elaborada o de una pesadilla hecha realidad.