Una manada de lobos irrumpe en una escuela primaria y una profesora llora al ver lo que lleva uno de ellos en la boca

En un golpe de suerte, James había traído consigo una fuerte cuerda. Examinándola cuidadosamente, se volvió hacia Tina con un plan. «Esta cuerda aguantará mi peso. Descenderé para averiguar qué hay ahí» Tina vaciló, con la mente agitada por el temor de que las cosas salieran mal.

Las dudas la corroían y se preguntaba si era lo bastante fuerte para sostenerlo. Notó que las manos de James temblaban ligeramente mientras se preparaba para el descenso. Entonces respiró hondo y empezó a descender por el borde del pozo. Tina agarró la cuerda con fuerza, dándose cuenta de que su viaje a las misteriosas profundidades del pozo iba a requerir todas sus fuerzas.