Merritt se fijó en la frase: no se registró ninguna salida. Sencilla sobre el papel, condenatoria en cuanto al sonido. Sin embargo, el detalle que contenía parecía incompleto, como una nota a la que le faltara el acorde final. Rodeó la frase en su bloc, marcándola para más tarde.
«El asa de la cámara tenía sus huellas», dijo Lowell. «Las imágenes de seguridad se perdieron cuando se cortó la luz» Hizo una pausa, dejando que el silencio implicara certeza. Merritt observó en silencio que a Lowell le gustaba actuar. La confianza, pensó, a menudo ocultaba los lugares donde debería vivir la duda.