Sin embargo, Brittany cree que son aún más valiosas que una sola empleada. Explicó: «Una de nosotras puede enseñar, y la otra puede responder preguntas sobre el material de la clase» ¡Es como tener un dúo dinámico con habilidades complementarias! Comprendieron que sus habilidades únicas y el trabajo en equipo las hacían increíblemente útiles en el aula.
El esfuerzo compartido de Abby y Brittany ejemplifica el poder de la colaboración y la importancia de utilizar los puntos fuertes individuales. Es como tener un puzzle en el que cada pieza tiene una función específica. Se dieron cuenta de que trabajando juntas podían ofrecer un apoyo integral a sus alumnos.