Sorprendentes imágenes reveladas: Una mujer graba en secreto una parada policial

Jenny sintió que la invadía una oleada de incredulidad y vergüenza. Quería gritar, explicar que todo había sido un malentendido, pero la situación la abrumaba. Estaba allí de pie, sintiendo el peso de muchos ojos sobre ella, juzgándola sin saber la verdad. Su mente seguía aturdida por el aterrador viaje en coche y las injustas acusaciones.

El agente que la había traído disfrutaba del momento, contando la historia con mayor dramatismo. «La vi dar un volantazo en la carretera y la paré. Luego, encontré esto en su maletero», dijo, levantando ligeramente la bolsa. «Parecen las cosas que se denunciaron como robadas del museo, ¿verdad?»