Una vez reducido y neutralizado el saboteador, el equipo de Ethan se dedicó de inmediato a restablecer el control de los sistemas del yate, y trabajó con eficacia para restablecer los sistemas de navegación, comunicación y seguridad, asegurándose de que todo volviera a funcionar de forma óptima.
El proceso constó de varios pasos, empezando por recalibrar los controles y realizar diagnósticos para asegurarse de que no se había producido ninguna otra manipulación. Poco a poco, los sistemas del yate volvieron a la normalidad y se neutralizaron las amenazas inmediatas.