Su gatito es raptado por algo que se esconde en el bosque, pero el vecindario no sabía que era un peligro para todos

Nina se subió a su regazo y ronroneó suavemente, enroscándose en una espiral perfecta. Fuera, los árboles se mecían en la oscuridad, y Lisa no miró hacia ellos. Esta noche no. Tenía todo lo que necesitaba aquí mismo. Seguridad. Calentita. Un hogar.