Una joven no para de hacer señales con la mano en un avión; cuando la azafata se da cuenta, alerta a las autoridades

Con expresión pensativa, miró al hombre y le preguntó: «¿Es usted su padre?» El hombre asintió, con la mirada fija. «Sí, es cierto», confirmó. «Su pareja no pudo acompañarnos en el viaje, así que estoy aquí en su lugar» Hizo una breve pausa y añadió: «Tiene dificultades para desenvolverse sola en este tipo de situaciones, en parte debido a su autismo. Es importante que tenga apoyo»

«Verá, se pone nerviosa, sobre todo en lugares como éste», continuó el hombre, y su explicación desplegó una narrativa muy distinta de la que Sandra y sus colegas habían imaginado en un principio. La tensión en el pecho de Sandra se relajó ligeramente al escuchar, dándose cuenta de la complejidad de la situación. ¿Cómo había podido malinterpretarla tan drásticamente?