Un agente encuentra a una niña y a su perro durmiendo entre la basura – ¡La verdad le rompió el corazón!

Manny permaneció a su lado, con voz baja y firme, calmando al animal lo suficiente para que los médicos pudieran trabajar. Mientras veía cómo subían a la niña a una camilla caliente, algo en su interior, algo que llevaba mucho tiempo dormido, se tensó con una feroz protección. Esta niña y su leal perro habían abierto una parte de él que creía muerta desde hacía años.

El equipo médico se movió con rápida precisión, diagnosticando hipotermia profunda, deshidratación y contusiones en distintas fases de curación, así como un grave shock emocional. Uno de los médicos murmuró que hacía mucho tiempo que no recibía los cuidados adecuados. Manny sintió que las palabras se le helaban en la espalda.