Padre De Dos Hijos (8) Descubre Que Es Infértil. En Lugar De Enfrentarse A Su Mujer, Hace Algo Peor

Condujo a casa bajo la llovizna, con los limpiaparabrisas haciendo tictac como un metrónomo. Por impulso, compró una caja de tartas de limón que a Claire le encantaban. Cuando se las entregó, ella enarcó una ceja, recelosa de la extravagancia, antes de besarle en la mejilla. Comieron juntos, con los dedos espolvoreados de azúcar en polvo.

Aquella noche, Claire tocó el piano en silencio, con cada nota cayendo como la lluvia sobre el telón de fondo de las noticias de la noche. Daniel doblaba la ropa cerca de ella, emparejando calcetines con sorprendente satisfacción. Observó cómo sus manos se movían sobre las teclas, pensó en los niños dormidos en el piso de arriba y susurró, casi avergonzado por su propia ternura: «Prométemelo para siempre»