Un elefante pide ayuda a un fotógrafo – La increíble verdad al descubierto

La hembra emitió un sonido grave, mezcla de cansancio y alivio, mientras observaba el reencuentro. Paul y el Dr. Ndaba no perdieron tiempo, aseguraron al bebé y volvieron a centrar su atención en la madre. Necesitaba atención médica inmediata.

Con el bebé sano y salvo, Paul y el Dr. Ndaba regresaron a la clínica improvisada. La madre elefante caminaba lentamente detrás, con las fuerzas mermadas. Paul sintió una renovada urgencia: salvarla era ahora su máxima prioridad.