Canela
Las hormigas tienen un excelente sentido del olfato y les desagrada mucho el olor a canela. Añada media cucharadita de aceite de canela a una taza de agua. Empapa una bola de algodón en él y úsalo para untar las zonas donde viven las hormigas. Repite este procedimiento hasta que desaparezcan las hormigas. Coloca palitos de canela enteros en el exterior, sobre todo cerca de la puerta, en los alféizares de las ventanas y otras entradas. También puedes poner el aceite de canela en un pulverizador y atacar a las hormigas allí donde las encuentres.
Vinagre
También odian el vinagre. Es una buena noticia porque así tenemos un repelente barato. Llena un bote de spray con agua y vinagre a partes iguales. Añada un poco de aceite con fragancia, como limón, este es otro aroma que las hormigas no toleran. Agítalo bien antes de usarlo y rocía bien todos los posibles puntos de entrada. Hazlo una vez al día hasta que las hormigas hayan desaparecido por completo.
Bórax
El bórax es un mineral natural que se utiliza en la mayoría de los pesticidas. El bórax se vende en polvo o como sal cristalina incolora. Se compra en algunos supermercados y, si no, en la farmacia. Todo lo que necesitas es una taza de agua tibia, media taza de azúcar, dos cucharadas de bórax y bolas de algodón. Mezcla todos los ingredientes y sumerge las bolas de algodón en la mezcla de bórax. Luego puedes colocar las bolas donde quieras, por ejemplo en los bordes de las puertas por donde suelen entrar las hormigas.
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Fuente: Viralmundo